El reciclaje en la construcción desempeña un papel crucial en la promoción de prácticas de construcción sostenibles. Los residuos de construcción y demolición constituyen una parte importante del total de residuos generados, y reciclar estos materiales ayuda a minimizar la necesidad de nueva producción. Este enfoque no sólo reduce las aportaciones a los vertederos, sino que también disminuye el impacto medioambiental. Utilizar los materiales existentes permite que los proyectos de construcción reduzcan su huella de carbono al tiempo que consiguen un ahorro de costes.